Cap. 3

 -JIIIMM!!! FELIZ CUMPLEAÑOS!!!!!! -Dijo, o mas bien.. Grito Joanne. Y me abrazo
 -Jo, gracias, de verdad, los quiero tanto.. pensé que no iba a verlos hasta dentro de dos días.
 -Bueno, de eso se trataba, Jimena- Comenzó George- era un sorpresa, si te hubiéramos dicho ayer no..
 -Si si callate adefesio- lo interrumpió Kevin- Feliz cumpleaños, linda, te estas haciendo viej.. que es eso-dijo mirandome el cabello- wow querida, tienes una naciente de canas ahí.
 Todos rieron, estuvimos un rato hablando en la habitación cuando entonces.. se escuchó desde la sala:
 -Jimena, maldita sea, que hace esta silla vuelta, y por que mi caja de cigarros está sobre el horno? NO FUE ESE EL LUGAR DONDE LA DEJE!!! - su voz sonaba algo extraña, las palabras estaban enredadas; era obvio que había estado bebiendo.

 Hacía mucho tiempo que mi padre no me hablaba de esa manera, evitaba salirse de control hacía algunos años, pero hoy.. hoy ya sabía lo que me esperaba.
 -Jime, lo siento yo agarré la caja de cigarros y la puse sobre el horno, estaba tirada junto a la puerta, simplemente quería... -Dijo Joanne angustiada pero la interrumpí.
 -Jo, todo va a estar bien, ahora.. ustedes deben salir de aquí, si se da cuenta de que entraron a la casa sin...
 -Jime, fue mi idea, cuanto lo siento, la puerta estaba entreabierta y supuse.. no creí que tu padre se molestara, era tu.. tu cumpleaños 


 -Chicos, ahora eso no importa, salgan por la ventada, hay una escalera pegada a la pared, esta algo tapada por las enredaderas- estaba hablando lo mas rápido que podía y casi que los empujaba hacia la ventana de mi habitación, escuchaba como el subía las escaleras- vallan rápido, puede mirar hacia la ventana y ahí si tendré problemas.

  Ya casi todos habían salido, solo quedaba John, cuando se detuvo en la ventana, me abrazo y me dijo con su suave voz:

 -Vas a estar bien mi niña, llamame - Me dio su común beso en la frente y bajo por la escalera. En ese momento la puerta se abrió de golpe.

 -Que diablos haces? Por qué miras por la ventana?

 -Creo que eso nunca ha sido un delito.

 -Porque mis cigarros estaban en otro lugar?

 -Estas ebrio, papá- sentí extraño llamarlo de esa forma, no lo merecía, el no era mi padre- No recuerdas donde dejaste la ultima vez tu caja de cigarros, simplemente quieres gritarme.

 -Escucha maldita perra, yo se donde dejo mis cosas!! ESTA CLARO?? 

 -Si -dije con la voz mas cortante que podía.

 -Responde bien idiota!! -gruñó.

 -Si, señor.

 -Quienes estaban hablando contigo? escuche voces cuando subía -hablaba con un tono realmente intimidante y se iba acercando a mi lentamente. No respondí.

 -RESPONDE!!!

 -Tenía un disco puesto, seguramente fue eso lo que escuchaste.

 -No era una canción, me crees estúpido? Alguien estaba en esta habitación -al decir esto comenzó a buscar debajo de la cama, se veía histérico, demente.

 -Al terminar la canción los... los Beatles hablan y se escucha claramente.

Se reincorporó y me vio con sus ojos verdes entrecerrados. Todo pasó muy rápido, cuando me di cuenta me estaba jalando del cabello, sentía que me lo iba a arrancar, el dolor en mi cabeza era insoportable

 -MIENTES!! A MI NO ME MIENTES!!!

 Su cara estaba muy cerca de la mía, mis ojos estaban llenos de lágrimas y podía oler su aliento a alcohol.

  -NO!! Sueltame!! Suel.. SUÉLTAME POR FAVOR!! 

 -Al diablo contigo, eres una asquerosa mentirosa -Y me escupió en la cara, vi como levanto su mano. Yo solo cerré los ojos lo mas fuerte que pude, noté las fuertes punzadas en la cabeza, no me soltaba el cabello. Entonces sentí como su pesada mano golpeaba fuertemente mi cara. Caí de medio lado en el piso de madera. Abrí mis ojos, me reincorporé un poco, tenía el cabello en la cara y la boca me sabía a sangre, seguidamente sentí una patada en la espalda, lo que provoco que volviera a caer contra el suelo. Escuché pasos y el portazo de una puerta.

 Me quedé acostada en el suelo, no quería volver a levantarme y verlo parado junto a mi. Pero me percaté de que el se había ido, ya que escuche otro portazo pero este era de la puerta principal. Había salido de la casa.

 Me levante como pude, me dolía todo el cuerpo. Mi corazón iba a estallar, al igual que mi cabeza, voltee un poco mi cuerpo y quedé frente al espejo; tenía el labio roto, y además sangre debajo de mi nariz y alrededor de mi boca. 

 Esto era demasiado, era mi único pariente, no tenía a quien hablarle, además a los chicos nunca les había contado de mi padre, de lo que era capaz de hacer. Me sentía desesperada, tapé mi cara con mis manos y me senté en la cama. No podía evitarlo, las lágrimas salían de mis ojos sin poder contenerlas, levante un poco mi cara y vi la cara de un hombre que me miraba, era la fotografía de John Lennon, su mirada me transmitía una tranquilidad que antes había sentido... John.. 

 -JOHN!! -dije o mas bien grité.

 John, mi amigo, no Lennon.. El me dijo que lo llamara, este chico sabía lo que me iba a pasar, el hace unos años había ido a buscarme y escucho como mi padre me agredía. Actué por instinto: Me dirigí a la sala y agarré el telefono, marque su numero con dedos temblorosos.

 -Hola? -Contestó John, me di cuenta de que no sabía que decirle.

 -Jo.. John? -dije con voz temblorosa.

 -Tu padre está allí? -preguntó

 -No.

 -Llego en 10 min. -Dijo y colgó.

Me senté en el sillón, comencé a pensar en lo sucedido, miré el reloj y me di cuenta que habían pasado casi 10 min y yo no había limpiado mi cara. No quería que John me viera así, se preocuparía mas, sentiría lástima ¬¬ 

 Me limpié un poco la cara y en eso escuche como alguien llamaba a la puerta. Sin pensarlo, la abrí. John me miraba con cara preocupación. Yo le sonreí, o bueno, eso intenté.

 -Maldito infeliz -dijo al parecer a sí mismo mirándome la cara.

 -No fue nada -intenté

 -Si claro, vamos, tal vez una toalla fría haga que te baje lo inflamado del labio.

Sin pensarlo, le obedecí. Fuimos a mi habitación, el salió de nuevo y yo lo esperé sentada en la cama, el volvió muy rápido con un toalla.

 -Vamos, acuéstate en la cama, se me hará mas fácil.

 -John, en serio no es necesario que hagas esto.

 -Escucha -me dijo agarrándome de los hombros- a mi no me engañas, se muy bien lo que te ha hecho ese desgraciado toda tu vida, tienes que salir de aquí, Jimena, y si es necesario le diré a mi madre y vivirás en mi casa el tiempo que necesites, pero no voy a permitir que te siga haciendo daño.

 -No fue..

 -Tienes que huir. -Dijo algo cortante y mirándome fijamente a los ojos, entonces hizo una mueca de preocupación y me abrazó muy fuerte, me seguía doliendo la espalda de la patada, pero no me importo, el abrazo de John era lo que necesitaba en ese momento. No pude evitarlo mas, nuevamente salieron lágrimas descontroladas de mis ojos ( ultimamente, ya no lo soportaba, ya empezarían a decirme la llorona ¬¬ ) Permanecí abrazada a el unos minutos.

 -Vamos, empaca tus cosas. -Dijo al soltarme. Yo le obedecí, guarde todo y el me ayudó a bajar la maleta, salimos de la casa y nos dirigimos al tren, cuando caí en la cuenta de algo...

 -John?

 -Sip?

 -Como llegaste en diez minutos a la casa de mi papá, tu casa está a casi 30 min de la suya.

 -Bueno, se podría decir que un atajo...

Me abrazo con un solo brazo, yo lo abracé y solo tuve una palabra en mente:

 -Gracias.

Este se limito a besar mi cabeza. Su cariño, su protección, eran como las de el hermano o quizá algunas veces hasta como las del padre que nunca tuve, que tanta falta me habían hecho. Realmente me había dado cuenta de algo: John era mi familia, mis amigos lo eran.

PD: Bueno, casi no se ha mencionado a los Fab Four en estos primeros tres capitulos, pero pronto, se haran mas importantes. No se si alguien a leído pero bueno, espero que si alguien lo hace, le guste por lo menos un poco y si tiene consejos, comente ;)