Cap.24 ''Zimmerman''

Se hizo un incómodo silencio que el chico interrumpió después de unos segundos.
 -Disculpame. -Dijo inesperadamente.



 -¿Que? -Pregunté perpleja. ¿John Lennon disculpándose conmigo? ¡Eso si que era nuevo! 
 -Que me disculpes.
 -Olvídalo -Dije poniendo los ojos en blanco y dándole la espalda- Ya estoy acostumbrada, Lennon. 
Sabía que John se estaba disculpando por nuestra pelea pero eso no era lo que me hacía sentir mal, si no, lo que les había asegurado a los chicos.
 -Escucha, vine a disculparme, es asunto tuyo tomar o no mi disculpa.
Me volteé furiosa y lo fulminé con la mirada.
 -¡Oh valla! -Dije con voz sarcástica- ¡Pero que gentil eres!
 -Bueno.. ¿Me disculpas? -Dijo con voz despreocupada ignorando mi enojo. Lo que hizo que este aumentara.
 -No. -Dije con firmeza, tenía ganas de golpearlo.
 -¿No? -Preguntó mirándome fijamente.
 -Ya escuchaste. -Aseguré. Lennon se puso de pie en silencio y salió de mi habitación, mientras yo me quedé parada en medio de la habitación y escuchaba sus pasos bajando las escaleras.
 -¡Mierda! -Murmuré enojada. Y cerré la puerta de mi dormitorio. Le di una patada a el escritorio para desahogarme pero solo conseguí un fuerte dolor en el pie, y un aumento a mi estado de animo de ese momento. Me desplomé en mi cama mientras pensaba.
 Me sentía mal por no haber aceptado su disculpa, quizá se hubieran arreglado las cosas entre nosotros. Pero no, sabía que el no se estaba disculpando de corazón y no quería arreglar sus problemas conmigo, seguramente los chicos lo habían obligado a que se disculpara... La forma en que John me había tratado frente a los chicos todavía me provocaba un profundo vacío en el estomago y hacía que las lágrimas quisieran volverse a asomar por mis ojos, pero lo evitaba con muchísimo esfuerzo. 
 Aunque nunca lo aceptara frente a los chicos, ni mucho menos frente a Lennon, ahora estaba segura de algo, que ya no valía la pena negarme a mi misma... Estaba enamorada de John, no sabía como era eso posible... Pero lo estaba. 
 Paso lo que para mi pareció media hora, entonces decidí salir de la casa e ir a dar un paseo, me arreglé... Me puse una diadema verde oscuro, unos zapatos cerrados cafes, una falda corta; pero no mucho; y una gabardina gris que me había regalado Ringo, que me gustaba mucho. Me veía muy bien, quizá eso haría que me distrajera un poco, además debía pensar en buscar trabajo.
 Baje las escaleras y entré a la sala de estar, John se encontraba allí con su guitarra. Lo ignoré y le di vuelta a la  perilla de la puerta, pero antes de salir...
 -¿A donde vas?
Me di la vuelta...
 -¿Te incumbe? -Lennon me miró unos segundos, haciendo un gran esfuerzo por no responderme y volvió a bajar la vista, concentrándose en su guitarra. 

 Abrí la puerta y salí... Comencé a caminar... Buscando algún anuncio de algún trabajo que me agradara, aunque no tenía idea de que quería...
 -Adivino, buscas algo de los Beatles -Dijo una voz junto a mi con acento americano, yo me encontraba viendo unos discos por el cristal en una tienda. Volteé a ver quien me hablaba, un chico delgado estaba junto a mi, me parecía vagamente conocido.
 -¿Que? -Salté desconcentrada- Oh no.. Yo.. No, créeme, tengo suficiente con verlos todos los días. -Aunque sabía que el chico no entendería lo dije, quizá el pensaría que hablaba de verlos por televisión.
 -Si lo se, es lo único de lo que hablan ahora aquí en Inglaterra, por lo que veo. -Había adivinado. -Soy Robert Zimmerman -Dijo tendiéndome una mano- me dicen Bob dylan.. Llamame Bob. -''Bob dylan'' -Dije para mis adentros mientras le estrechaba la mano- ''¿Por qué me suena tan conocido?'' 
 -Oye.. tu... te he escuchado.. -Dije sonriendo al reconocerlo, los chicos hablaban de el constantemente.
 -Vaya -Dijo- Que honor que una chica tan bella lo haga. -Me sonrojé.
 -Pero... ¿Que haces en Londres? 
 -Estoy de paseo -Explicó. -No me has dicho como te llamas, preciosa.. -''Preciosa'' repetí en mi mente.
 -Soy.. Soy Jimena Beckenhamm.
 -Lindo nombre... Casi tan hermoso como tu -Agrego, haciendo que volviera a sonrojarme.




 Caminé con Bob Dylan por Londres, algo asombrada por su atractivo y también la mayor parte sonrojada por sus halagos.
 -Y ¿Que haces por aquí?
 -Busco trabajo. -Respondí sin pensar.
 -¿En serio? -Preguntó mirandome.
 -Así es... -Dije algo avergonzada.
 -Oye... -Comenzó dudando un poco- Se que, bueno... No se si te interesa... Tengo un amigo que es fotógrafo y pues.. El está buscando modelo para exponer su trabajo..
 -Yo no soy modelo.. -Lo interrumpí.
 -Bueno, pero permiteme decirte que eres muy linda, extrañamente hermosa... Creo que le agradaría mucho a mi amigo trabajar contigo... Bueno, piénsalo...  Toma mi numero -Dijo entregándome una tarjeta- Llámame si aceptas y nos reunimos con mi amigo.


 Caminamos un rato mas, yo estaba algo conmocionada por esa propuesta, pero al pensarlo bien.. No me parecía una mala idea, igualmente... Decidí pensarlo mejor.
 -Bueno... Se hace tarde.. -Dije mirando el reloj, eran casi las 10:00pm - Creo que es mejor que me valla a mi casa.
 -Tengo mi auto estacionado cerca, puedo ir a dejarte.


Y así, Bob me llevó hasta la casa de los chicos... Cuando nos estacionamos frente, reconocí las sombras de George y Paul apoyados en la puerta fumando.
 -¿Quienes...? -Comenzó Bob, pero yo lo atajé.
 -Son mis hermanos... -Mentí apresurada.
 -Oh.. Bueno...
 -Nos vemos.. -Dije abriendo la puerta del auto, temía que reconociera a los chicos.
 -Espera... -Y tomó mi mano- Fue un gusto platicar contigo, espero... Espero que nos veamos pronto -Me veía directo a los ojos y me sonreía coqueto. Entonces vi como se acercaba cada vez mas a mi cara... Podía notar su aliento, entonces... Sus labios rozaron los míos... Sabía que eso era extraño, apenas nos conocíamos... Pero solo me deje llevar y le devolví el beso.
 -Cuídate.. -Dije con una pícara sonrisa y salí del auto... Corrí hasta la puerta de la casa y escuché como Bob se iba...
 -¿Donde estabas? -Preguntó Paul.
 -¿Quien era el que te trajo? -Continuó George.
 -Un amigo -Dije sonriendo aún en las nubes y agradeciendo que los chicos, debido a la oscuridad, no hubieran visto lo que pasó dentro del auto. Entré a la casa seguida por ellos.




   FEBRERO, 1964: Unos meses después.


 -.... Y si no tienes mas dinero, sacas de la canasta que esta escondida dentro de...
 -¡Paul! Ya me dijiste eso cuatro veces. -Lo interrumpí -Estaré bien, en serio.
Paul me miró entre preocupado y nostálgico.
 -Además tendrá a Bob -Dijo Ringo.
 -Aún no entiendo por qué no nos lo has presentado... -Murmuró George molesto.
Estábamos desayunando, los chicos pronto se irían para America, lo que ellos no sabían era que Bob pronto se iría también... Claro, no lo he dicho... Eramos novios, teníamos tres meses saliendo, y temía que los chicos lo conocieran... El no sabía que yo vivía con los Beatles y ellos no sabían que mi novio era uno de sus artistas favoritos.
 -Pronto lo conocerán, Georgie... -Dije mirándolo algo angustiada. 
 -Cuando volvamos de América, tendrás que enseñárnoslo... 
 -¿Ya tienen todo listo para mañana? -Preguntó John entrando a el comedor.
John y yo, ya no peleábamos, ahora... No nos hablábamos en lo absoluto, solo en una situación extremadamente necesaria. Pero cada vez que alguien mencionaba a Bob, el se ponía de pie y se encerraba en su habitación.
 -Chicos.. Pronto expondrán mis fotografías ¿saben? Me gustaría que fueran... -Dije algo confundida y tímida. Aún me avergonzaba el hecho de ser modelo un poco, y aún mas que ellos vieran las fotografías pero me sentía orgullosa de ello y quería que ellos también de mi... Después de todo, eran mi familia.
 -Allí estaremos. -Aseguró Ringo.
 -¡Ya quiero ver las fotografías! -Dijo George con ojos soñadores.
 -Seguro te ves preciosa. -Dijo Paul sonriéndome tiernamente.
 -Gracias, Paul. -Dije avergonzada aunque sabía que ellos solo querían animarme.
 -Seguramente, ''Bob'' estará encantado de verlas... -Dijo John de un pronto a otro con una fingida voz dulzona. Se hizo un extraño e incomodo silencio en el que John y yo nos fulminamos con la mirada.
 -Bueno... Quizás podremos conocerlo ese día... -Exclamó Paul intentando suavizar el ambiente.
 Me puse de pie, molesta. Lennon me había arruinado el momento de orgullo de mi misma y mi conversación con los chicos.
 -¿A donde vas? -Preguntó Ringo- No has acabado con tu desayuno.
 -Se me quitó el hambre. -Sentencié con voz fría y seca sin quitarle los ojos de encima a Lennon. Deje los platos en la cocina y me dirigí a mi habitación.


 Esta había cambiado un poco, ahora habían dibujos, hechos por mi pegados desordenadamente en una pared, habían lapices de dibujo, pinturas y algunos parchones en el piso esparcidos en el rincón donde trabajaba siempre: Dibujar, era mi desahogo... Y me era demasiado familiar, era como mi aliado, siempre que me sentía mal, enojada, traicionada, triste... Lo que fuera... Sabía que podría ponerme a pintar, y se me pasaría rápidamente todo. Además, ahora habían algunas fotografías tomadas por mi en el cuarto y además, tres tipos de cámaras fotográficas diferentes. Había tenido que llevar unos cursos de fotografía para poder modelar, y la verdad era que me gustaba mucho, me sentía muy a gusto y realizada con lo que hacía ahora, además de que me pagaban bastante bien. 
 Tomé el teléfono que había en la mesa de noche de madera y marqué.
 -¿Hola? -Contestaron.
 -Hola, ¿Se encuentra el Sr. Dylan? -Pregunté, sabía que estaba hablando con su mayor domo.
 -No señorita, salió hace una hora. -Explicó.
 -Oh, comprendo. Gracias. -Y colgué.
 Era extraño, Bob generalmente salía conmigo, seguramente estaría grabando o en alguna entrevista.. Quien sab..
 -¿¿JIMENAA??? -Gritó la voz de George desde abajo.
 -¿¿QUEE?? -Respondí.
 -HAY UN CARRO ESTACIONADO FRENTE A LA CASA, CREO QUE ES...
Pero yo ya me encontraba bajando a toda velocidad las escaleras, no sabía por qué temía tanto que Bob y los chicos se conocieran, pero solo se me ocurrió entrar a su auto y evitar que saliera, quizá aún no lo hubiera hecho. Pero antes de terminar de bajar las escaleras...
 -¡¡¡Aaaahhh!!! -Grité. 
Me había tropezado en uno de los escalones y ahora me encontraba.. ¡¡ME ENCONTRABA SOBRE JOHN!!
 -Mierda.. -Murmuré- Lo siento.
 -No.. no te preocupes... -Su cara estaba muy cerca de la mía.
 -Me tropecé.. -Explique avergonzada.
 -Lo se... -Dijo John- Pero.. yo.. ¿Podrías...?
 -Oh.. Oh claro.. Lo siento... -Y me puse de pie tendiéndole una mano a el también para que se levantara.
Los chicos miraban la escena intentando contener la risa. Pero entonces antes de que alguien pudiera decir algo tocaron la puerta y Paul dio media vuelta para abrir... Antes de que yo pudiera evitarlo...
 -Buenas, soy Bob Dylan... Supongo que eres el...
Paul estaba pasmado viendo a Bob al igual que los otros tres chicos... Y lo peor de todo era que al parecer Bob también los reconocido...